El domingo pasado una condesa viuda, italiana y con mucha pasta, se nos coló en casa. Se llamaba Carmela Lomanetti. Anda que no llevaba joyas ni ná, la mujer. La invitamos a tomar el té, porque pensamos que eso sería a lo que dedicaba las tardes la señora condesa. A eso y a salir de compras. Nos lo pasamos muy bien con ella, aunque no nos enterábamos de nada de lo que hablaba.
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| Ya véis el joyerío que gasta. |
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| Se moría de la risa cuando se miró al espejo. |
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| Pura elegancia, algo caduca tambien. |
Esperamos que la señora condesa se fuese a Italia contenta y que se acuerde de nosotras cuando redacte testamento.
Susana no eres teatrera ni nada jajaja y yo creyendome que te habia ido a ver una condesa italiana jajaja un beso guapa desde leon
ResponderEliminarBueniiiiiiiiiiisimo! Tuta bella la tua filia (o algo así)
ResponderEliminarJAJAJA ESTA MONISIMA!!, ME ENCANTA DISFRAZAR A LAS NIÑAS CASI DISFRUTO TANTO COMO ELLAS, JAJAJA
ResponderEliminarBESOSXXX
Esta guapisima y las joyas le quedan muy bien ,ten cuidado Susana que los va a tener a pares.
ResponderEliminarBesines.